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Síntomas del alcoholismo

El alcoholismo se conoce como una dependencia o adicción física al alcohol, para saber si una persona es alcohólica deber presentar alguno de los síntomas que nuestro Centro de Rehabilitación en Medellín Mentenueva presentará a continuación.

  • Falta de control sobre el consumo de alcohol, la necesidad de beber y la incapacidad de parar de hacerlo.
  • Deseo intenso de beber alcohol.
  • Síntoma de síndrome de abstinencia cuando no se consume, es un malestar físico que se intenta aliviar con el mismo consumo.
  • La persona consume cuando está solo, y en compañía trata de ocultar su conducta.
  • Interferencia en la vida cotidiana, comienzan a abandonar todo lo que les produce placer por el alcohol, y descuidan otras áreas de su vida, como el aspecto personal, el rendimiento laboral o académico.
  • La tolerancia al alcohol cambia, por eso beben cada vez más para lograr los mismos efectos.
  • Sufren de lapsus o lagunas mentales, que se caracterizan por la falta de recuerdos.
  • El consumo de alcohol persiste evadiendo las consecuencias físicas que puede ser el daño hepático o la desnutrición, psicológicas como la depresión, la ansiedad, el deterioro cognitivo, o las repercusiones que tenga sobre la actividad laboral, las relaciones familiares y sociales, entre otros.

Si nota alguno de estos síntomas o tiene dudas con alguno de ellos puede pedir ayuda en nuestra línea de atención del Centro de Rehabilitación en Medellín, teléfonos: (300) 7864016 | (+574)3223763, para identificar el problema y llegar a una solución.

Consecuencias del alcoholismo

El consumo constante de sustancias como el alcohol tiene grandes manifestaciones en la salud, estas aparecen como respuestas físicas durante el periodo de abstinencia y se relacionan con temblores, sudoración, dolor de cabeza, nauseas, ansiedad o aumento de la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea. Estos síntomas vienen de la mano con el deseo de consumir más alcohol, aunque no es normal que un alcohólico reconozca que tiene una adicción.

El tratamiento requiere una intervención multidisciplinar de varios profesionales que atiendan los aspectos físicos y psíquicos, así como las patologías asociadas. El diagnóstico medico se hace más difícil mientras el paciente continua consumiendo y generando más tolerancia a la sustancia. Aunque hay algunos indicadores en la sangre que permiten al médico conocer si hay realmente un consumo continuo y excesivo del alcohol. El volumen en los glóbulos rojos aumenta fuertemente con unas cifras de 94-95, puede llegar hasta por encima de 100.

Además de la valoración médica, la evaluación psicológica es fundamental pues con el diagnóstico de los síntomas el especialista hablará con el paciente o un familiar sobre sus hábitos en cuanto al consumo de alcohol, además se realiza un examen físico y unas pruebas para detectar problemas físicos o patologías que pueda haber desarrollado por el abuso del alcohol.

Las consecuencias del alcoholismo se pueden clasificar por sus efectos físicos, psicológicos y sociales. En el primero el paciente puede sufrir de cáncer, enfermedades en el hígado, cefaleas, diabetes, gastritis, problemas cardiovasculares, insomnio, pancreatitis, hemorragia cerebral, deficiencias nutricionales, degeneración cerebral o disfunción eréctil; en los efectos psicológicos se puede encontrar la depresión, ansiedad, ira, imposibilidad de controlar los celos, epilepsia, psicosis, síndrome de korsakoff o demencia alcohólica; y finalmente en los efectos sociales se puede dar la desestructuración familiar, problemas laborales o económicos, accidentes y maltrato emocional o físico.

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